París Saint-Germain cayó 2-1 en la ronda de los octavos de final de la Copa de Francia en el Vélodrome de Marsella y suma una dolorosa derrota de cara a la Champions League, donde se medirá al Bayern Múnich de la Bundesliga de Alemania. Alexis Sánchez abrió el marcador por la vía penal al minuto 31 y Ruslan Malinovskyi puso el segundo tanto al 57’; Sergio Ramos dio ligera esperanza a los parisinos al 45’+2.
Cuando parecía que llegaba la calma, que la tempestad amainaba, apareció Sergio Ramos para complicar la existencia al París Saint-Germain. No estuvo fino en una carrera con Cengiz Ünder, quien le ganó en velocidad para después caer dentro del área trabado claramente por el central español. Al 31’, Alexis Sánchez no falló la pena máxima y confirmó la buena primera parte del Olympique Marsella, que, sin embargo, se echó atrás en el último tramo, jugó con fuego y se quemó.
Tras un aviso de Neymar, quien estrelló una pelota contra el poste, fue Sergio Ramos quien empató para enmendar su error al 45’+2. Con un cabezazo marca de la casa, casi en el tercer minuto del tiempo de descuento y tras un córner lanzado por Lionel Messi, igualó un duelo que se decidiría en el segundo acto.
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Su tanto, en el minuto 57, dejó contra las cuerdas al París Saint-Germain, que tenía algo más de media hora para evitar el tropezón.
Sin embargo, sólo Lionel Messi, con un disparo desviado, se acercó al gol y el del argentino fue el único chispazo de un equipo que acabó rendido al gran partido del Olympique Marsella, primer verdugo de la temporada para el conjunto parisino.
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