El Teatro Degollado fue el recinto que albergó la edición 65 de los Premios Ariel, que reconocen lo mejor del cine mexicano.
La tan esperada ceremonia reconoció a como mejor película a El norte sobre el vacío de la directora Alejandra Márquez Abella, lo que causó sorpresa ya que Bardo parecía ser la favorita.
Alejandra señaló que una mujer gane un premio por su trabajo en el cine y que los premios hayan tenido nominaciones mayormente para mujeres, es algo que no ocurre en todos los países.
“Que nos acordemos que esto no es una cosa generalizada en el mundo,creo que México tiene la delantera en la inclusión de mujeres en la industria (…) hay que seguir peleándonos y defendiendonos temiendo que nos los quiten”, señaló la directora.
Mientras que al Ariel para Mejor Dirección fue para Alejandro González Iñárritu por su película Bardo, falsa crónica de unas cuántas verdades, que de cierta manera es una autobiografía.
“El reconocimiento que tuvo ‘Bardo’ a lo largo de la ceremonia es el resultado de todo el trabajo de todas las personas (…) creo que ha sido la película más difícil que he hecho, el acabarla en sí fue un regalo de poderme sentir orgulloso de haber terminado algo tan complejo y tan retador”, señaló.
En el caso de actor el ganador fue Daniel Giménez Cacho por Bardo, falsa crónica de unas cuántas verdades, en la que interpreta a un documentalista mexicano que hace carrera en Estados Unidos.
“Como había tantas coincidencias por eso me dio el papel (Alejandro Iñárritu) luego fuimos descubriendo muchas más coincidencias durante el rodaje (…) lo que me gusta es la diversidad que hay, tenemos que seguir luchando para que se sigan abriendo más canales para que haya más películas locales para que entre mexicanos nos enteremos de qué pasa en Ensenada, qué comen los niños en Veracruz.
(…) Seguimos con ese problema que ya es viejo y que no podemos ver nuestras películas porque estamos en una guerra de Spiderman que nos tiene con telarañas porque hay una guerra del mercado y debe solucionarse por el Estado”, sentenció Daniel Giménez Cacho.
La mejor actriz para la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas fue Arcelia Ramírez por su interpretación de Cielo, una mujer valiente que busca a su hija a toda costa, contra el poderoso y temible crimen organizado.
“Este Ariel es para las mujeres que por desgracia en este país, están buscando a sus hijos, ojalá que México transite a un sistema de justicia que no permita a ni una Cielo más, muchas gracias”, declaró Arcelia.
En el caso de Mejor diseño de arte fue para el reconocido artista Eugenio Caballero, por su trabajo en la película Bardo, falsa crónica de unas cuántas verdades.
“Me trajo la energía creativa que encuentro en este país (…) esta película no se podría haber hecho sin un grupo de trabajadores como los que encontramos”, señaló.
Alejandro González Iñárritu arrasó y se llevó el premio a Mejor edición junto con Mónica Salazar.
“Este es un premio mucho más significativo porque pertenece al país en el que nací (…) creo que es algo que me alegra y me calienta el corazón muy profundamente”, declaró ‘El negro’ Iñárritu.
Huesera se llevó algunos de las nominaciones que recibieron como Mejor Opera Prima y Guion Original.
“Tengo que decir que sin duda se ve esperanzador, ahorita podemos confirmarlo con cuatro (mujeres) nominadas a mejor dirección. No es que sea nuevo, hemos estado aquí siempre (…) feliz de ser parte de estas directoras tan diversas”, declaró la directora emergente Michelle Garza.
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